... en el vasto universo.

Mientras admiro el recorrido diario a través de la ventana del camión, me da por querer estar en cama, en nuestra cama, enredada en tus brazos, sintiendo en la frente tu barba, cerrando los ojos, muriendo de calor, sin la persecución del reloj.

Así mientras  contemplo la vista de una ciudad que nunca descansa, entiendo que tus brazos son sólo un lugar en el universo… mi lugar favorito, por mucho.

Llovía

Esta noche no hay luna y afuera sigue la tormenta, tú me abrazas y  repites un par de veces: -Llévame al mar y hazme el amor hasta que se me olvide que afuera hay un mundo que nos espera.
Te beso, te beso, te beso y te acaricio el pelo, -Cari, cualquier día de estos te llevo al mar y prometo que no habrá planes de regresar-.

La lluvia no cesa y nosotros en cama con ganas de que esos sueños pronto sucedan.

Magia de martes

Noches de charla, sexo y mariguana, hasta terminar compartiendo silencios viendo la ciudad desde la ventana. Se nos fueron las horas hablando de todo y de nada, mordiendo mi labio inferior mientras te observo mover los labios sin parar, hasta que nuestras miradas se cruzaron y sin escalas brincamos a la cama.

Tus manos, siempre tímidas, me fueron desprendiendo de todo lo que traía puesto, mis labios repetían tu nombre hasta que se encontraron con tu cuello, y lo besaron, al igual que tu espalda, tus brazos, tus piernas tus labios… hasta perder el pudor, una y otra vez, en el colchón.

Fue una noche con olor a hierba, sin frío, refugiados bajo las sábanas, amenizada por un par de cervezas, poco tabaco y algo de marihuana.

Fue la magia del martes, del 2008 y las drogas blandas.

Uno más, antes de volar.

Hablas y hablas mientras le das un par de caldas al porro que te acompaña, yo enciendo un cigarrillo y camino rumbo al sofá, para fumar frente al paisaje que ofrece la ventana, casi nada de sol, un gran árbol y la calle. Tú continuas relatando historias de cuando viajabas por el país con tu vieja banda, pero hace rato que ya no sé lo que dices, hace unos minutos que dibujo un cielo cargado de nubes, en mi vieja libreta.

A veces en este lugar, me da por pensar que mi vida contigo es similar al tiempo en que sólo pintaba árboles, hasta que me dio por dibujar aves,libres, de alas grandes.

Camino de regreso a la cama, donde tus manos con calma me recorren la espalda y me dan unas ganas locas de quedarme contigo y echar raíces, pero luego recuerdo como lucian aquellas alas en las hojas de la libreta y pienso… un último polvo y prometo que me echo a volar.

Pon música en mi vida.

Satura mi vida con los géneros que te provoquen sonrisas y ponme a bailar al ritmo de tu melodía favorita.Agóbiame con canciones, despiértame el amor con nuevos ritmos, mientras se eriza mi piel con la música que sueltan las bocinas, tus manos y tus besos.

¡Encárgate cariño, de musicalizarnos la vida!

Purificando a base de llanto

Noche errónea para perder el control, el ron fue el detonante para que escaparan un chingo de sentimientos guardados que en la madrugada terminan por quebrarme los ojos y sacudirme el cuerpo en arqueadas y suspiros. El proceso de purificación necesario para alcanzar el desahogo y la paz emocional, de quien reprime el sentir para no estar fuera de moda.

Tanta ilusión tiene por consecuencia una serie de sentimientos, desencadenados por sus besos y sus manos, que a su vez se estrellan con la cruel indiferencia que ya viene manejando a diario.
El último recurso fue bailar, pero ante la sin respuesta, se quiebran mis ojos y no queda más remedio que huir.

Lo siento, prefiero salir corriendo a quedarme bailando cuando en mis ojos esta lloviendo

Para ti

Hoy descubrí que tu lado maldito es capaz de convivir con mi lado hostil; siempre que tu aceptes lo único que soy capaz de ofrecerte: mi locura. Probablemente en mis pocos momentos de lucidez, cuando las voces callan y me descubras sin el disfraz cotidiano…¿te enamorarás? Mientras tanto abraza la enferma mente que es capaz de incluirte como un personaje mas…para jugar.

El Abrigo

Cauteloso, satisfacía su necesidad del mundo observando desde la ventana, protegiéndose tras el vidrio.Nunca salio a caminar o a fumar con otros hombres por la calle; temía que alguno estropeara su grueso abrigo...Aquel con el que se protegía ¿del frío?.

Aquí no se detiene el tiempo

Que siguen pasando las horas, el tiempo nos come la vida y el reloj sin descanso sigue marchando. El sol por aquí sigue saliendo, mientras la luna sigue asomando por fases su cara y nosotros como el resto del mundo seguimos esperando cambios, milagros, alguna sorpresa  para el futuro o por lo menos el anunciado fin del mundo.

Y aun así, tú sigues sin notar que estamos perdiendo todo el tiempo del mundo, que los trenes pasan y nosotros no estamos tomados de la mano, saltando vagones en busca de suerte.

Permite que sucedamos y  el tiempo no se detenga, mientras nos gastamos la vida en clichés baratos de enamorados.

Delirios veraniegos

En estas noches veraniegas el calor se vuelve insoportable y no importa que este encuerada sobre la cama, por la ventana no entra aire, mi cuerpo continua sudando y el sueño se esfuma, porque al igual que yo detesta el calor.
El insomnio no es problema, desde que era una niña comparto con el días y semanas, estas ojeras gigantescas son prueba del  tiempo que tenemos de conocernos. El verdadero problema es la condenada imaginación, tengo un problema cuando se trata de ella… siempre se me sale de control, me sumerge en una ficción tal que al final prefiero quedarme sumergida en ella, olvidando por completo que existe la realidad, jugando a que me da igual el que pasará.

Así paso buenos ratos sin enfrentar el mundo, acalorada en mi cuarto…  con insomnio, que me permite creer que lo puedo todo.

Inestabilidad Emocional (20 pasos)

Parte I: Del Casi llego a quererte al Por favorcito que no te encuentre.
Parte II: Del ¡Ay cabrón como me haces daño! al ¡Ay cabrón como te extraño!
Parte III: Del ¡Este trago es pa olvidarte! al ¡maldita sea, ese trago me dio el valor pa llamarte!
Parte IV: Del Me dejaste hecho pedazos al Quiero volver a estar entre tus brazos.
Parte V: Del Vuelve a quererme es todo lo que pido al Te prometo que esta vez si te olvido.
Parte VI: Del ¿Qué paso que dejaste de amarme? al No vuelvas a buscarme
Parte VII: Del  Me enloquece tu sonrisa al  De olvidarte tengo prisa.
Parte VIII: Del Sólo quiero acariciarte al ¡Vas y chingas a tu madre!
Parte IX: Del  En ti siempre voy a creer  al  Por tus besos volví a perder.
Parte X: Del Por fin me libere de tu amor al ¡No me dejes por favor! 
Parte XI: Del Comienzo a amarte al Quisiera poder odiarte
Parte XII: Del  Tus caricias me llevan al cielo al Debí quedarme en mi propio infierno
Parte XIII: Del  ¿Por qué me rompes el corazón? al  ¡Venga, quítate el calzón!
Parte XIV: Del Como yo no nadie te ama al  Para olvidarte, con cualquiera me voy a la cama. 
Parte XV: Del  Contigo el resto de mi  vida al Contigo ni a la esquina.
Parte XVI: Del  Es tiempo de emprender la huida al Pasa conmigo el resto de tu vida
Parte XVII: Del  Te dejo por dignidad al Te perdono todo, pero vuélveme a besar.
Parte XVIII: Del  ¡No me dejes, mi amor!  al  ¡Ya no me molestes, por favor!
Parte XIX: Del me muero si no te vuelvo a ver al De ti nada quiero saber.
Parte XX: Del te amo intensamente al ¿Esta mal si deseo tu muerte?

No te vayas

La sonrisa que muestro todas las mañanas es una de las ventajas al tenerte como aliado de cama. Otra de ellas es la ausencia de frío en la recamara, y las charlas infinitas, cosquillas nocturnas, bailes absurdos, orgasmos constantes, excedente de tabaco los fines de semana,  planes que derrocan a las monarquías restantes, abrazos espontáneos, guardias nocturnas, y como esas muchas.

Entenderás que eres elemento importante en mi trinchera y podrás comprender que caigan de mis ojos un par de lágrimas cuando terminas de empacar tus cosas y amenazas con emprender un viaje, en el que no está incluida mi compañía.


-No te vayas, qhari; susurro desde la ventana, mientras sigues lo que parece ser tu nuevo camino, sin mirar atrás, sin encontrar tus ojos, llenos de ilusión, con los míos que reflejan la tristeza de mi corazón.

Error moderno

Si, brincamos al colchón pero sin ninguna sincronización, lo hicimos a destiempo, equivocando cama y compañía. Nos conformamos porque esa noche la cerveza fue mucha, porque las miradas se cruzaron, porque la soledad ya reinaba, porque el baile incita, porque la piel pedía caricias, porque el deseo ya no aguantaba, porque al final nos dio la gana.

La desesperación llega acompañando a la resaca. Los nervios de perdernos después de todo eso, mordernos las uñas ante el miedo de que por culpa de aquel desenfreno sea imposible recuperarnos, que todo lo que trabajamos los últimos meses se vaya al carajo, porque nos descubrimos incapaces de establecernos, escondiéndonos en el egoísmo, ante la máxima moderna de: “no somos nada”.
 
Sin embargo después de esa noche nada regreso a su lugar y al final tuvimos el pretexto para no perder lo que nosotros llamamos libertad y el resto del mundo conoce como soledad.